En los camerinos Chucho salta y grita repetidamente “¡estoy contento, muy contento!”, mientras Erika y Marco hablan sobre los personajes de la nueva obra de teatro. Chucho sale a escena. Erika y Marco continúan su plática, cuando Chucho regresa les dice “el público está de la chingada”. 

A partir de este día, los actores se dedicarán a darle vida a una nueva obra de teatro, una que no está escrita para ellos, no es para ciegos. Esta obra los desafiará a representar personajes con vista normal, un reto al que nunca se habían enfrentado. 

Camino a Casa contrastará esta obra de teatro con la realidad de cada uno de los actores y las dificultades que afrontan para poder hacer lo que más les gusta. Reflexionaremos sobre la identidad, la memoria y la estigmatización de la ceguera, exponiendo ciertas preguntas: ¿Qué imágenes viajan por su memoria? ¿Recuerdan cómo son sus rostros? ¿Qué les gustaría observar? 

Los cuatro actores se encuentran en el camerino, saltan sin control y terminan gritando “¡mierda!”. Chucho sale del camerino, sube al escenario, el telón se abre lentamente.